2020-05-15 |
El Alto te enseña a donarte. Seguirás perseverando en la oración y poco a poco sueltas cada aspecto de tu vida a mi. Cuando empieces una actividad dirás: Dios mío, solo permite esto si es de tu agrado. Dame tus ojos para ver verdad. Dame tus oídos para oír a todos como lo hizo tu Hijo. Dame tu boca para que solo sean las palabras del Espíritu las que salen de mi y no las mías.
Cuando debas tomar una decisión dirás: Señor, solo permite que haga lo que te agrade, llévame por el camino correcto; muéstrame por donde quieres que ande y si debo caminar entre tinieblas para tu luz, no permitas que me pierda en medio de la oscuridad.
Cuando trabajes dirás: Señor ofrezco esta labor de mis manos para tu Gloria y mi santificación. No permitas que haga nada en contra de tu voluntad y asísteme para llevarte puesta en cada instante y así dar testimonio de ti.
Cuando enfrentes dificultad dirás: En el peligro Señor, estás conmigo. El Señor es mi luz y mi salvación. ¿A quién temeré? Escucha Señor, yo te amo. Apiádate de mí y ayúdame a seguir solo tu camino.
Dónense mis amados como mi Hijo se donó en todo. Dónense en sus familias, en sus labores, a sus cercanos, en mi santa misión. Dónense por completo. Así se ama, así se practica caridad perfecta.
Se analizan, ¿En qué no se donan? Corríjanlo ahora. Se avecinan tiempos que solo soportarán mis humildes, acostumbrados a donarse, a la dificultad, que aceptan y perseveran en la adversidad.
vienen plagas y hacen estragos. Las ranas, las moscas, insectos que el clima exacerba y alborota. Algunos enferman al hombre, otros dañan cultivos y ponen en peligro la comida. Regiones enteras en hambruna. Os digo ahora, no volverán los tiempos de tranquilidad en lo que las malas noticias en el mundo eran contadas con la mano. El orbe se estremece y acontece mucho. Las naciones sufrirán en demasía. Se desequilibra todo.
Mi iglesia está por sacar decreto que permite lo abominable. Se protestantiza con disculpa de adaptarse a los tiempos. Penoso y doloroso es. El Rey enviará a Ave a proteger a mis hijos predilectos fieles para no caer en el error y se hacen a un lado por obediencia. Les retan. Pero serán más los que apoyan y se unen a estas corrientes abominables. Todos del lado del enemigo. Aquí mis críos deben cuidar no asistir al sacrificio en iglesias donde estén estos sacerdotes. Muchos acuden a sacerdotes que desertan y empiezan muchas misas privadas y en casas de familias santas. No permitiré que anden solos sin recibir a mi Hijo. A cambio os pido ser familias de mis hijos valientes y que caminan con la verdad y darles sustento. El sustento necesario. Abandonados y desechados quedarán, pero su fidelidad será paga.
Hijos, ¿me agradarán con el sacrificio perfecto en el santuario?
Dios me pide abrir el libro en mi mesa de noche: “La imitación de cristo” y abre en la página 194-196. “Nada más dulce que el verdadero amor…”
“Nada más dulce que el verdadero amor, nada más fuerte, más sublime, ni más perfecto en el cielo y en la tierra. Porque el verdadero amor nace y viene de Dios y no puede tener otro fin donde se logre sentir plenamente realizado en Dios.
4. El que verdaderamente ama corre, vuela, y está alegre. Es libre y nada lo retiene. Lo da todo para conseguir el Todo, y todo lo obtiene del que es Todo. Porque su reposo y su fin están en el Bien Único y Supremo, de quien proceden todos los demás bienes.
El verdadero amor no se fija solamente en dones que recibe, sino en el que le regala esos dones, el cual vale muchísimo más que los regalos que reparte.
El verdadero amor no conoce límites y siente verdaderas llamaradas de fervor. No siente la fatiga de lo que tiene que aguantar ni hace caso de la fatiga; quisiera hacer aún más de lo que puede. No cree que sea imposible trabajar más, porque juzga que todo lo que hacer lo puede hacer. Por eso encuentra fuerzas para todo, y hace y lleva a cabo tantas cosas, mientras que el no ama se desanima y deja de obrar.
5. El verdadero amor está siempre en vela y alerta y hasta mientras duerme está despierto. Se fatiga, pero no se agota. Como una llamarada, aunque la estrechen, no la logran sujetar, y aunque traten de ahuyentarla no le logran quitar su calor, y sube y vuela hacia arriba, pasando por sobre los obstáculos. Si alguno ama, entiende el clamor de esta voz. Fuerte clamor que llega hasta los oídos de Dios, es el ardiente deseo de nuestro espíritu que le dice: “Dios mío. Amor Mío. Tu eres todo mío, y yo soy todo tuyo”.
6. El discípulo: Señor, lléname de verdadero amor, para que mi corazón experimente cuan agradable es saber amar como tú lo quieres. Que el amor de caridad me eleve sobre mi mismo, sobre mi egoísmo. Que te ame más que a mí mismo. Que a los demás los ame en ti, y por ti, como lo ordena la ley del verdadero amor.
7. Cristo. El amor verdadero es sincero, amable, fuerte, paciente, fiel, prudente, magnánimo, respetuoso, desinteresado; no busca satisfacer el propio egoísmo sino conseguir el bien para los demás.
“El amor de caridad es paciente, es servicial, no es envidioso ni orgulloso. No busca su interés. No se irrita. No recuerda las ofensas. No se alegra de la injusticia. Se alegra con la verdad. Todo lo excusa. Todo lo cree. Todo lo espera. Todo lo soporta” (1 Corintios 13).
Cuando lo que uno busca es satisfacerse a sí mismo, ya no tiene verdadero amor.
El amor verdadero es casto y no se dedica a vanidades. Es constante, es sereno y sabe gobernar sus sentidos.
Quien verdaderamente ama, tiene respeto y obediencia hacia los superiores; reconoce humildemente que es débil y pecador, y vive muy agradecido con Dios. Siempre confía en el Señor, aunque se sienta privado de consuelos, porque en el amor no se vive sin dolor.
8. Quien no esté dispuesto a sufrir y a sacrificarse por el amado, no merece el nombre de amante. Es necesario que el que en verdad ama, acepte penas y amarguras por su amado, sin separarse de El por ningún contratiempo ni adversidad que suceda. “Nadie tiene mayor amor que el que sacrifica su vida por los que ama” (Juan 15, 13)”
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2020-05-05 |
CAREO EN LA O.N.U., SE HABLARÁ DE LA CURA DE LA GRIPA. ¡NO SE SANA A NADIE!. ASONADA EN SIENA, ¡NADIE SENA!, NO HAY NADA; EL AGRO NO DA NADA, NO HAY AGUA, NO HAY GAS, NO HAY GRANO, NO HAY ROPA, NO HAY PAN, NO HAY PAGO, NO SALEN A NADA, NO SANAN DE ESA PESTE. ¡PESAR Y CRUEL ES PROPAGAR ESA PESTE!.
SE ARRESTARÁ AL OÍR Y VER NO ESTAR ALIADO A ESA ALIANZA DE LA O.N.U.
CENSOS HARÁN PARA PODER APARTAR MAS Y USAR DATO.
SANAN AL UNGIR Y AL ORAR. ¡LA PAZ! |
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